Preguntas frecuentes

Es importante saber que desde el nacimiento hasta los 6 años se produce el período de mayor cambio neuronal y mayor aprendizaje de nuestras vidas. Por ello es de vital importancia una intervención temprana si vemos algunas de las siguientes señales de alarma:

• Entre los 0 y 6 meses: El bebé no llora, no aparece sonrisa social o no balbucea.

• Entre los 6 y 12 meses: solo emite vocales, no responde a los intentos de juego e intercambios comunicativos que el adulto le ofrece.

• Entre los 12 y 24 meses: no sigue instrucciones simples, no dice "mamá", “papá” ni otros nombres, no señala/ reconoce partes del cuerpo, no presta atención a los cuentos o juguetes.

• Entre los 2 y 3 años: no emplea frases de dos palabras ni sigue instrucciones verbales de dos pasos, por ejemplo: “Pon el libro en la estantería y me das otro”.

• Entre los 3 y 4 años: no emplea frases de tres elementos (“Papá plancha la camisa”), no incrementa su vocabulario o los desconocidos no entienden lo que dice el niño.

• Entre los 4 y 5 años: no emplea oraciones de cuatro elementos, no comprende lo que se le dice y no es capaz de contar de forma breve una historia.

• Entre los 5 y 6 años: no emplea oraciones complejas, no es capaz de contar una historia de forma clara e inteligible para todos.

Además debe acudir si presenta:

• Tartamudez

• Retraso o problemas con la lectura y la escritura

• Afonía

• Mutismo

• Sistema orofacial deteriorado: malos hábitos como chuparse el dedo, mordisquearse los labios, morderse las uñas o el bruxismo, que consiste en apretar o rechinar las estructuras dentales de forma involuntaria.

• Respiración oral

• Deglución atípica: la lengua, los labios o la musculatura peribucal presionan los dientes en una u otra dirección generando un gran desequilibrio óseo que provoca maloclusiones dentales y sus consiguientes alteraciones orofaciales.

El logopeda es un profesional que puede intervenir desde el nacimiento hasta la tercera edad por lo que su campo de actuación es muy amplio. Una persona deberá acudir al logopeda cuando presente la siguientes problemáticas o patologías:

• Mal uso o abuso vocal.

• Pólipos, nódulos, quistes

• Disfonía o afonía

• Parálisis de cuerdas vocales

• Parálisis facial

• Laringectomía

• Deglución atípica

• Respiración oral

• Si tras haber sufrido un ictus la persona tiene problemas para comunicarse o comer

• Enfermedades neurodegenerativas o demencias como alzheimer, ELA, parkinson,etc.

• Dificultades en el aprendizaje

• Síndrome genético (síndrome de Down, síndrome de Rett, etc)

A modo resumen podemos decir que una persona debe acudir al logopeda cuando presenta factores de riesgo para padecer trastornos del lenguaje, la comunicación, el habla, la voz, la deglución y la audición, o ya tiene dichas dificultades.